LA MIRADA GLOBAL

Una colosal burbuja

POR GERMAN FERMO
 
Cada año de esta crisis iniciada a mediados del 2007, ha enseñado algo. Hasta el momento, 2012 parecería querer enviar un mensaje muy claro: los mercados han adoptado la noción de una permanente asistencia monetaria por parte de los dos principales Bancos Centrales del mundo: la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) y el Banco Central Europeo (BCE); y por lo tanto hasta parecería estar fuera de moda shortear a estos mercados.
 
La Fed ha articulado una muy extensa secuencia de medidas monetarias desde fines del 2007. Comenzó con poner su tasa de referencia en cero por ciento. Luego inició dos Rondas de Flexibilización Cuantitativa (QEI y QEII) e implementó adicionalmente dos Operation Twists con el objetivo de continuar aplanando la parte larga de la curva de tasas esta vez, esterilizando las compras de bonos largos.
 
Y, para finalizar, el 13 de septiembre último la Fed de Bernanke anunció su Tercer Ronda de Flexibilización Cuantitativa (QEIII) con la característica que esta vez la intervención se hará en el mercado de deuda hipotecaria y que será con final abierto enviando un claro mensaje a todos los pesimistas: "Estoy y no les voy a decir cuándo me correré del mercado como sostenedora en última instancia del nivel de precios de activos financieros".
 
LOS EUROPEOS
 
En forma más atenuada, como siempre ha sido el caso, Europa está intentando enviar un mensaje similar. El último 6 de septiembre anunció su programa condicional de intervención en el mercado de deuda soberana europeo, con el objetivo de disminuir los niveles de yields en las partes largas de las curvas de países como España, por ejemplo, que afrontan un 25% de tasa de desempleo, aspecto clave para reestimular la inversión y con ella crecimiento sostenido de largo plazo. El BCE también ha comunicado que su intervención será por tiempo indeterminado enviando un mensaje similar al de la Fed de Bernanke. Sin embargo, este plan de intervención llamado OMT (Outright Market Transactions) será totalmente esterilizado resultando en una gran diferencia respecto al QEIII de la Fed.
 
Lo cierto es que resulta muy evidente que ambos bancos centrales tienen un firme propósito de intervenir a los efectos de sentar un piso al riesgo global y esa actitud al menos por el momento ha sido muy festejada por los mercados. No es nuevo comentar sobre esta forma de ilusión monetaria que intenta contagiar expectativas positivas en un entorno macro que todavía permanece débil y con una crisis de deuda en Europa a años enteros de resolución definitiva.
 
No caben dudas de que la política monetaria históricamente acomodativa que viene aplicando la Fed ha generado un colapso tan significativo en las tasas de retorno de los bonos que el mundo entero está ávido y en constante búsqueda de instrumentos que permitan generar tasas de retorno por sobre las implícitas en bonos soberanos de poco riesgo tales como Estados Unidos y Alemania. Bajo este contexto, los activos que más rechazo sufrieron al inicio de la crisis a mediados del 2007, mortgage-backed-securities (instrumentos de renta fija con hipotecas subyacentes) son ahora cinco años después, muy demandados porque ofrecen retornos extremadamente atractivos.
 
Es interesante observar como todo vuelve en los mercados internacionales. Todo lo que no se quería comprar por 2007/2008, parece actualmente atraer a una enorme cantidad de inversores buscando retornos en un mundo de tasas históricamente deprimidas. 2012 parecería indicar que los mercados llevan ya tanto tiempo de permanente distorsión que la misma peligrosamente se ha  tomado como un aspecto inherente del sistema y por lo tanto fundamental. Sin dudas, el accionar de la FED intenta comprar tiempo y eso  está muy bien. También es cierto que de una crisis de esta  envergadura no se sale solamente vía emisión monetaria.
 
Los mercados  permanecen calmos ante esta renovada hola monetaria dominada por QEIII  y OMT pero Estados Unidos y Europa deberán mostrar que a los shocks monetarios se los deberá en algún momento acompañar de reformas  estructurales y fiscales de relevancia. Que quede bien claro: el mundo entero está parado en una burbuja gigantesca que lejos está de ser estable.
 
 (*) GERMAN FERMO es Ph.D. in Economics (UCLA) y director de la Maestría en Finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella. Consultor  Económico MacroFinance: www.germanfermo.com