Passarella: "Me he dado cuenta que es muy difícil ganar esta patriada solo"

El presidente de River Plate, Daniel Passarella, confesó hoy que se dio cuenta de que "es muy difícil ganar esta patriada solo", en referencia al modo de conducción del club, y sostuvo que está "tratando de ser más político" luego del descenso del equipo a la Primera B Nacional.

"Son todas sospechas, no hay ninguna prueba. Queremos alguna prueba. Si no hay pruebas, uno acusa injustamente", respondió sobre una consulta acerca de las sospechas que recaen sobre la dirigencia en varios temas, como las ventas de Diego Buonanotte y Erik Lamela, los barras que apretaron a Sergio Pezzotta en el partido ante Belgrano y la vieja polémica sobre los recitales.

Tras afirmar que "los famosos Borrachos del Tablón no fueron los que protagonizaron los incidentes en el partido contra Belgrano", Passarella dijo que River afrontará la "nueva etapa" que le toca vivir, en el Ascenso, con "responsabilidad, dignidad y compromiso", y estimó que la participación del equipo en la segunda categoría del fútbol argentino será "muy transitoria".

El presidente de River fue el protagonista central del evento que se realizó en el Salón de Honor del estadio Monumental para presentar al plantel, ya que su polémica presencia se llevó casi toda la atención.
 

Así, tras afirmar que Buonanotte mintió al afirmar que le cedió a River el quince por ciento (poco más de 1,6 millones de pesos) que le correspondía por su transferencia al Málaga, intentó despegarse de la barra brava del club, a cuyos líderes se los observó en un video yendo a apretar al árbitro Sergio Pezzotta en el partido ante Belgrano de Córdoba que desembocó en el descenso del equipo a la B Nacional.

En un tramo de su alocución, el "Kaiser" se mostró autocrítico al indicar que se dio cuenta de que "es muy difícil ganar esta patriada solo", y sostuvo que está "tratando de ser más político".

Pese a ello, no pareció mostrarse arrepentido de su pelea con el presidente de la AFA, Julio Grondona, a quien le pidió la renuncia después del Superclásico que River perdió en la Bombonera con un arbitraje que lo perjudicó de Patricio Loustau.

"Dije lo que sentía y en el ámbito en el cual lo tenía que decir", comentó sobre su pelea con Grondona en una reunión del Comité Ejecutivo de la AFA.

Passarella, quien tras la pérdida de la categoría de River tuvo un acercamiento con el titular de la AFA, remarcó que está "en un momento de apertura, convocando a todos los dirigentes de la minoría opositora, y vamos a convocar a otra gente, ex presidentes del club, porque me parece haber recapacitado".

"A veces, como jugador de fútbol en un partido por ahí lo podía ganar solo, y lo digo modestamente. A veces sucede que un jugador lo puede ganar solo, pero aquí me he dado cuenta que es muy difícil ganar esta patriada solo", agregó, mientras los integrantes del plantel lo escuchaban sentados detrás suyo junto al cuerpo técnico comandado por Matías Almeyda.

Passarella estuvo acompañado por los vicepresidentes del club, Diego Turnes y Omar Solassi; por el tesorero Luis Renzi, quien reiteró que River tendrá un superávit de 86,5 millones de pesos en el próximo balance; y por Daniel Mancusi, uno de los integrantes del Consejo de Fútbol.

La presentación del plantel terminó siendo atípica, ya que Passarella saludó a los jugadores, leyó "una declaración de principios" y se mostró convencido de que el equipo regresará pronto a la B Nacional.
Passsarella resumió esa "declaración de principios" en tres palabras: "Responsabilidad, dignidad y compromiso".

"Jugar en River es una gracia de Dios y tenemos que dar la vida", leyó al explicar en qué se basaba la declaración de principios.

"Dignidad significa que respetamos a todos los adversarios que vamos a enfrentar y las reglas que vamos a cumplir", agregó y por último leyó: "Confiamos en el compromiso de Matías, en su cuerpo técnico y particularmente en el de nuestros jugadores".

En cuanto a lo futbolístico, reconoció que River tiene "responsabilidades, pero no presión".