Peritos de la Gendarmería trabajan con las armas secuestradas a un delincuente y a un policía de la Federal

Analizan de dónde partió la bala que mató a una adolescente en Flores

Voceros policiales dijeron que seguramente los resultados de los estudios establecerán que fue el ladrón quien efectuó el disparo mortal, ya que según testigos fue el único que disparó en dirección a la víctima.

Peritos de Gendarmería Nacional analizaban hoy las armas secuestradas a un delincuente y a un Policía Federal que protagonizaron el tiroteo en medio del cual murió baleada anoche una adolescente de 17 años en el barrio porteño de Flores.

Fuentes vinculadas a la pesquisa informaron  que tanto el arma secuestrada al efectivo de la seccional 38ª, como la Bersa 9 milímetros, con la numeración limada, hallada en poder del ladrón, están a estudio de los peritos con el fin de certificar de cuál partió el proyectil que mató a la joven Fernanda Cabral.

Voceros policiales dijeron que seguramente los resultados de los estudios establecerán que fue el ladrón quien efectuó el disparo mortal, ya que según testigos fue el único que disparó en dirección a la víctima.

"Hay dos testigos que cuentan que el ladrón corría, el policía lo perseguía y la joven iba detrás caminando, y que el primero cada tanto se daba vuelta y disparaba sin mirar", aseguró un jefe policial, quien agregó que en el lugar se efectuaron cerca de 10 disparos.

Los voceros añadieron que el ladrón, de 40 años y domiciliado en Merlo, tenía cuatro pedidos de captura por hechos de robo y que a raíz de dos disparos que recibió ayer durante el tiroteo con el policía -uno en el cuello y otro en una pierna- se halla muy grave y con riesgo de quedar cuadripléjico.

El hecho se inició ayer a las 18 en un maxiquiosco ubicado en avenida Varela al 300, en la zona oeste de esta Capital Federal, donde ingresó un hombre que pidió sacar unas fotocopias.

En el local se hallaban el dueño y un empleado, quienes a los pocos minutos fueron amenazados con un arma que el recién llegado extrajo de su mochila.

Los dos hombres fueron encerrados en el baño del comercio y el asaltante se apoderó del dinero que había en la caja, de dos celulares y de algunos efectos más, con los que escapó.

En tanto, tras la huida del delincuente por la calle José Bonifacio, el dueño del maxiquiosco salió a la calle y comenzó a perseguirlo hasta que se encontró en la esquina de esa calle y Pedernera con un efectivo de la seccional 38ª, a quien le pidió ayuda.

Según las fuentes, el policía le impartió la voz de alto al ladrón, que le respondió a los tiros.

El efectivo repelió la agresión y se originó un enfrentamiento que terminó cuando el delincuente cayó herido de dos balazos, uno en una pierna y otro en el cuello, mientras que la joven de 17 años, identificada como Fernanda Cabral, que pasaba caminando por detrás del policía recibió un tiro en el abdomen, dijeron los informantes.

Tras el tiroteo, la adolescente, y el asaltante fueron trasladados al Hospital Piñero, donde la menor murió y el ladrón permanece internado con custodia policial.

TODO MUY RAPIDO

La suegra de Cabral dijo hoy que el hecho sucedió "en menos de cinco segundos", cuando su nuera llevaba a una hija suya a catecismo.

"Ella estaba viviendo en mi casa con mi hijo y mi nieto (de un año y medio), ellos vivían en Merlo y vinieron a vivir acá para tener más posibilidades", contó esta mañana a la prensa Alicia Martínez.

"Pasó que yo me sentía mal y no podía llevar a mi hija de 10 años a catecismo entonces ella, como era tan bondadosa, se ofreció a llevarla", agregó la mujer.

Martínez añadió que a media cuadra de su casa, situada en la calle Pedernera 311, ocurrió el hecho, por lo que ella escuchó los disparos y salió para ver qué había sucedido.

"Escuche los tiros y me levanté de la cama descalza. Cuando fui la gente no me dejaba pasar, yo le decía las nenas estaban ahí. Cuando vi a mi hijo oí que decía 'Fernanda' y vi que mi nuera estaba tirada toda ensangrentada. Era una nena de tan solo 17 años, un horror", agregó.

Según Martínez, su nuera era "una chica muy dulce, muy trabajadora y muy carismática" y la familia espera ahora que le entreguen el cuerpo para poder velarla.

Sobre el episodio, la mujer consideró que "por más policías que cuiden los comercios, los delincuentes son más y tienen más velocidad que los policías para robar y escapar. Ellos son delincuentes y tiran sin medir nada para cubrir su escape y también saben que policías van a tener más cuidado al disparar".